AFROCOLOMBIANIDAD

ACTORES AFROS

JAIR ROMERO 

Jair Romero es un guajiro de 28 años que, tras una década de intentos de acercarse a la actuación en Bogotá, logró el sueño de su vida: debutar como protagonista al encarnar a Joe Arroyo, en la historia que RCN graba sobre el ídolo salsero y que se estrenaría a final del año. "No me lo creo. Estoy ansioso -dice-. Cada mañana me levanto pensando que todo es un sueño y cuando me doy cuenta de que esta es ahora mi vida, le doy gracias a Dios".

Su padre, un locutor de Riohacha, y su madre, una declamadora nata de poemas, querían para él una carrera distinta de la artística. "Deseaban que estudiara algo que diera dinero: ingeniería, derecho, alguna cosa de esas, pero no era lo que me movía", afirma Romero.

Y vino a la capital a cumplir el sueño, pero el camino no fue fácil. Al comienzo, se acomodó en algunas pensiones y cuando la plata escaseaba, recuerda haber vivido "de arrimado en las casas de las amigas que iba conociendo".

Tocó puertas en las programadoras, llevó hojas de vida, se ofreció a trabajar gratis con tal de que conocieran su talento, pero no lo consiguió. Y sus ahorros se acabaron, así que, armado de valor, cantó en los buses. "Me iba bien. Me hacía lo del diario", cuenta.

Después vendió llamadas a celular. "Fui de los primeros que acaparó el negocio", recuerda. Luego fue mesero, sintiendo que se alejaba de su sueño: "Y más cuando la novia que me quitó la aureola -dice entre risas- quedó embarazada".

Entonces, empezó a cargar bultos en una empresa de plásticos.

La oportunidad de actuar le llegó por casualidad, cuando se encontró con Humberto Rivera, jefe de casting del Canal Caracol, al que considera su ángel de la guarda.

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